¡ODA A LA PUTA VERRUGA!
Hoy viendo a mi asistente Pedro Luis (Cuca) hablando por teléfono con su enamorada, pude observar con detenimiento lo patético de esa conversación, escuchar por ejemplo como este le decía:” SI MI CUCHI CUCHI”, “¿ME HAS EXTRAÑADO?” “QUE NO TONTA, QUE YO MAS” “¡QUE NO!” “A QUE YO MÀS” y al cavilar sobre toda esa colección de estupideces, yo podía imaginarme la cara de la "jillipollaz" que estaba al otro lado del teléfono, haciendo los mismos comentarios idiotas.
Todo esto me hizo reflexionar en que el amor casi nunca tiene razones de ser, o si las tiene, suelen no tener importancia a la par de la locura que nos provoca el estar enamorados, las razones pueden ser buenas o malas, ya pueden ser en pro o en contra del amor, lo cierto es que son como la cola de un cometa, que esta pero podría no estar y a nadie le importa ni le interesa, porque los seres humanos cuando nos enamoramos inexplicablemente se nos descalabra el corazón y luego el cerebro en un último intento por guardar la cordura trata de darle un orden lógico al enamoramiento y entonces argumentamos razones a veces ciertas, lógicas, algunas veces tontas y la mayoría de las veces sin mucho éxito, porque la verdad es que no existen razones manifiestas ni lógicas para el amor, no hay demasiadas justificaciones y tampoco tenemos muchas explicaciones para enamorarnos, podría ser de un gallego, un asturiano, un catalán, un latino, un chino o hasta de un vasco y porque no hasta de un madrileño, que con los locos que están esos tíos, eso sí sería de pena, pero suele darse y al final si las justificaciones no son suficientes para tranquilizar nuestro miedo a lo desconocido, argumentaremos un rotundo "PORQUE SI" “ PORQUE ME DA LA GANA Y YA ESTA”, y esta justificación tan irracional y tonta es la más hermosa porque es cuando llegamos a la conclusión de que aunque sea un sentimiento loco y sin sentido es hermoso, es total ¿Y por qué no? es grandioso llegar al convencimiento de que definitivamente estas flipada por este tío;
Porque el enamoramiento es un estado de miseria mental en el que nuestra conciencia y nuestra inteligencia se estrechan, se empobrecen y se nos paraliza el cerebro, algo así como una “diarrea mental” Así de irresponsable y maravilloso es el amor, es un cúmulo de sensaciones y sin razones, de temblores y sudores inexplicables, porque cuando el amor hace mella en tu corazón, las estrategias para pensar en otra cosa, las buenas intenciones de enamorarse de la persona adecuada y los brebajes para dejar de sentir escalofríos y mariposas en el estómago no surten ningún efecto porque nada se opone al delirio amoroso, nadie puede doblegarlo y es entonces cuando los enamorados se miran hasta gastarse, se descubren, se maravillan, se hipnotizan, porque el otro por mas feíto y tonto que sea, por más pirado que este y aunque sea solo una “hipoteca con patas” es fuente de éxtasis, todo hasta el más mínimo y estúpido detalle y hasta los defectos se idealizan y se magnifican, hasta una verruga en la cara que en otras circunstancias seria la cosa más espantosa, en ese momento de paja mental, lo vemos como un hermosísimo lunar y lo convertimos en algo sexi, divino y hasta podríamos ser capaces de hacer el más sublime poema, algo así como una “Oda a la puta verruga”.
Por eso cuando se habla de estar enamorado como un loco es mentira, deberíamos decir que se está enamorado como un "jilipollaz" Los sueños y deseos del otro, pasan a ser el punto central de nuestra vida; El enigma de la existencia humana es cualquier cosa si lo comparamos con la importancia de lo que desea el ser amado, nos entra un deseo irrefrenable de ser siameses y estar pegados uno al otro las 24 horas del día, como si fuéramos uña y mugre; El amor es nada maduro, pues nos convertimos de un momento a otro en críos y comenzamos a hacer y decir las cosas más estúpidas que se puedan imaginar, un ejemplo de esto sería: “CUELGA TÙ, NO CIELO, CUELGA TÙ, NO MI AMOR, QUE CUELGUES TÙ, NO TONTA TÙ PRIMERO, BUENO NO MEJOR LOS DOS A LA CUENTA DE TRES”, “BUENO AMOR, 1, 2, 2 1/2….JAJAJAJA… NO PUEDO CARIÑO… NO PUEDO DESPEDIRME”…y linduras y tonterías como esas nos acompañan cada día, provocando las sensaciones mas vomitivas que se puedan imaginar en quienes nos rodean y tienen la desgracia de padecer el tormento de nuestro romance de cerca.
El enamoramiento es además el tiempo en que sentimos la felicidad de poder decir, “cariño mío, me haces cosquillas, justo ahí donde debiera sentirlas” y eso, solo eso es ya la hostia; El amor también es puro egoísmo, ¿que no?, ¡si lo es!, porque es cuando en tu atontada cabeza solo revolotea la loca idea de: ¡te quiero porque te quiero!, ¡te quiero porque se me da la gana y aunque no quieras yo te quiero!;
Y no penséis que yo me considero inmune a esta enfermedad que se llama “amor”, porque en algún momento de mi vida yo también sucumbí a los efectos malignos de este sentimiento y he tenido esa actitud patética e imbécil que identifica a los enamorados;
Que la cara que me cargo desde hace ya bastante tiempo no es mera casualidad, es porque yo misma he sentido en mi mente no muy clara, los desastres que causa el puto amor en las personas , yo también he cometido las mismas estupideces de las que les comento, así que nadie y cuando digo nadie ¡es nadie! ya sea viejo, joven, rico, pobre, feo , guapo, cachas, flaco, enano o largo como un silbido de lechero, está a salvo de esta epidemia;
¡Y qué suerte que sea así!
¡QUE BUENO QUE EN ESTE MUNDO DE MIERDA AUN EXISTA EL AMOR!
Autora: Dagah
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